Así es UGT
La Unión General de Trabajadores somos una organización sindical de inspiración socialista, independiente y autónoma con más de 120 años de existencia, que nos estructuramos bajo el principio de la solidaridad de todos sus miembros. Formamos parte de una Confederación, la Unión General de Trabajadores de España y nos involucramos por igual en la defensa de los derechos de los trabajadores, independientemente del sector o federación a los que pertenezcan. UGT es una de las primeras vías de representatividad de afiliados y delegados sindicales en Ceuta. Abarcamos todas las profesiones existentes, incluidas las más novedosas emanadas de los avances tecnológicos y la transformación del mercado laboral.
Como sindicato más representativo participamos en las comisiones ejecutivas de las instituciones en las que se gestionan los servicios y prestaciones cubiertas por las aportaciones que los trabajadores realizan durante su vida laboral. A través de nuestros representantes en dichas instituciones se puede mejorar la gestión para los trabajadores y ciudadanos. Pero también estamos permanentemente defendiendo tus intereses en las diferentes mesas de negociación colectiva abiertas con los empresarios.
Ante todo, trabajamos por la defensa y promoción de los intereses sociopolíticos, económicos, profesionales, sociales y culturales de los trabajadores. Desarrollamos una ardua labor para organizar a los trabajadores, a efectos de la reivindicación cotidiana en pro del acrecentamiento del bienestar moral, económico e intelectual de los mismos. Lo hacemos de una manera democrática, inspirada en nuestro firme propósito de adhesión y defensa del orden fundamental libremente instaurado por todos los españoles.
Todos los que componemos este sindicato nos comprometemos a practicar entre sí la solidaridad moral y material, haciendo todos los esfuerzos y sacrificios que las circunstancias permitan, a fin de que los trabajadores no se vean obligados a ceder en las luchas que provoquen sus demandas.
Buscamos el desarrollo de políticas generales que afecten al conjunto de los trabajadores y persigan la transformación de la sociedad. Tratamos de fortalecer el movimiento sindical libre y mantenemos relaciones con otras organizaciones sindicales.
Especialmente trabajamos para el desarrollo de las políticas sociales: representamos los intereses de los trabajadores en sanidad, educación, empleo, seguridad social, políticas de mercado de trabajo y salud laboral. Ejercemos una especial defensa de las reivindicaciones de las mujeres y de los jóvenes, evitando cualquier forma de discriminación basada en el sexo o en la edad. Defendemos los derechos de las personas mayores, garantizando la suficiencia económica y el bienestar de estos ciudadanos. Perseguimos la integración laboral y social de las personas con discapacidad y de las minorías y colectivos marginados. Promovemos la integración social de los trabajadores extranjeros y velamos por la utilización racional de todos los recursos naturales con el fin de mejorar la calidad de vida y defender y restaurar el medio ambiente.
Un poco de historia
La UGT, fundada en el Congreso Obrero de Barcelona de 1888, no logrará enraizarse en Ceuta hasta finales de los años veinte. Su núcleo fundacional parece haberse gestado en torno al Sindicato Ferroviario, que comenzó a funcionar en los años veinte. La crisis de subsistencias provocada por la primera guerra mundial y las duras condiciones laborales y sociales de los trabajadores ceutíes dio origen a la toma de conciencia de la clase obrera entre 1917 y 1921 y surgieron las primeras organizaciones sindicales, sin adscripción concreta: Centro Obrero Ceutí, Asociación de Dependientes de Comercio, la sociedad de albañiles El Módulo, Sociedades de Obreros de Carga y Descarga del Puerto La Aurora y La Naval, La Alianza Africana del Progreso de los Trabajadores de Hostelería.
Sólo a finales de la Dictadura de Primo de Rivera, en el período conocido como la Dictablanda, que se extiende entre 1929 y 1931 comenzarán a surgir las organizaciones ceutíes de las dos grandes centrales españolas: CNT y UGT. Ambas conocerán una rápida expansión durante la República y se disputarán la hegemonía sindical en Ceuta.
Las primeras organizaciones obreras ceutíes integradas oficialmente en la UGT, tras la aceptación de la Ejecutiva Nacional fueron: Electricidad, Fuerza Motriz y Similares (fundada en mayo de 1931, aprobada por la ejecutiva el 21 de octubre de 1931 con 78 afiliados), Empleados de Banca (aprobada por la ejecutiva el 16 de junio de 1931 con 71 afiliados), Transportes Mecánicos (aprobada 16 de junio de 1931), Sociedad de Obreros del Ramo de la Construcción (aprobada el 5 de octubre de 1932 con 90 afiliados), Sociedad de Obreros de la JOP de Ceuta (aprobada el 9 de marzo de 1932 con 88 afiliados).
En el censo elaborado por UGT de cara al Congreso de 1932, publicado en octubre de 1931, se recogía para todo el Norte de África un total de 18 sociedades con 1.702 afiliados al corriente de pago, repartidos entre Alumbrado (2 sociedades con 265 afiliados), Banca (3 sociedades con 81 afiliados), Barberos (1 sociedad con 17 afiliados), Camareros (1 sociedad con 120), Cocineros (1 sociedad con 8), Comercio (2 sociedades con 245), Espectáculos públicos (1 sociedad con 8), Metalurgia (1 sociedad con 200), Obras del Puerto (1 con 56) Obreros de la Madera (1 con 12), Transportes Urbanos (2 con 260), y Varios (1 con 250). Aproximadamente entre 800 y 900 afiliados norteafricanos pertenecerían en ese momento a la UGT ceutí.
Durante los meses previos a la proclamación de la República, la UGT ceutí, íntimamente ligada al PSOE por lazos orgánicos e ideológicos y actuando como brazo sindical del partido, participará activamente en las actividades pro republicanas y dará respaldo político y material a las candidaturas de la conjunción republicano-socialista, que a la postre ganarían ampliamente las elecciones municipales de 1931 en Ceuta, llevando a un importante número de sus afiliados a los escaños municipales (David Valverde, Valentín Reyes, Juan Arroyo, Domingo Vega, Manuel Pascual, Antonio Becerra, José Lendínez, Francisco Bohórquez, etc.).
Durante el primer bienio republicano jugará un papel reformista, moderado y negociador, mientras su máximo dirigente ocupaba el Ministerio de Trabajo, reformando desde el Gobierno la legislación obrera. En esos años ejerció un control absoluto de las instituciones laborales ceutíes: Delegación de Trabajo, Oficina Obrera de Colocación, Jurados Mixtos, control que fue favorecido por la abstención de la CNT de cualquier forma de participación institucional.
En el momento de mayor auge de la organización en Ceuta, a lo largo del año 1933, pudo llegar a contar con un máximo de 3.000 afiliados repartidos en unas 20 sociedades (Banca, JOP, Ferrocarril, Carga y Descarga, Construcción del Puerto, Electricidad, Agua y Fuerza Motriz, Panaderos, Tracción Mecánica, Auxiliares de Farmacia, Empleados de Oficina, Dependientes Municipales, Dependientes de Farmacia, Dependientes de Espectáculos Públicos, Ramo de Construcción, Trabajadores del Petróleo, Trabajadores de Estado del Ramo de Guerra, Hielo y Gaseosas, Artes Gráficas, Enfermeros de Hospitales Militares y Obreros de Establecimientos Militares). El Censo Electoral Social de 1933 les asigna 2.000 afiliados, aunque no todas las sociedades figuraban en el Censo.
Desde finales de 1933, tras la salida de los socialistas del gobierno, comenzará un período de radicalización que les lleva a la política de las Alianzas Obreras (alianza con la CNT y los Comunistas) y la acción revolucionaria Participará activamente en la Importante huelga portuaria de finales de 1933, que arrastró a una huelga general, en la que será apresado y juzgado su dirigente Antonio Parrado Gil (ex responsable de la Oficina de Colocación Obrera y dirigente de las JJ SS). Será el sostén en Ceuta de la huelga general revolucionaria de 1934, que llevará a la cárcel a todo su núcleo dirigente Jiménez Cazorla (Presidente AS), Antonio Tomeu Novo (Vicepresidente de la Federación de Asociaciones Obreras de UGT y de la AS), Francisco González Raposo (Secretario de Dependientes Municipales), Luis Cano Pousa (Presidente de la FAO de UGT), Francisco Pío (FAO UGT y Presidente JJ SS), Enrique Velasco, Tomás Hernández, Sebastián Ordóñez (Presidente de la Casa del Pueblo), Lendínez, Valverde, Vega, Sertorio Martínez, Becerra, Valentín Reyes, etc.). La mayor parte serán procesados y condenados a diversas penas de prisión en Consejo de Guerra por sedición.
Tras superar la crisis provocada por la represión y la clausura de sus locales, a finales de 1935 se lanzará de forma decidida al apoyo de la candidatura de Frente Popular, que ganará con amplitud las elecciones generales de 1936 en Ceuta. Tras la victoria del Frente Popular se lanzó a una ofensiva sindical, apoyando una escalada reivindicativa y huelguística, que tenía como objetivo recuperar las condiciones de trabajo anteriores al bienio negro.
El golpe de estado del 17 de julio de 1936 supuso la prohibición de la organización, la clausura de sus locales, la persecución y encarcelamiento de sus dirigentes, la represión y el asesinato (con o sin la farsa de un consejo de guerra sumarísimo) de más de un centenar de sus dirigentes y afiliados.
Sólo en los últimos años del franquismo reaparecerán viejos afiliados que se reúnen clandestinamente en torno al Bar Noray, propiedad de Fructuoso Miaja, preparando la vuelta a la vida activa del PSOE y la UGT. La UGT volverá a actuar a partir de la transición política, siendo la primera central sindical que se organiza en Ceuta, en 1976.
La UGT se convertirá en la central mayoritaria en Ceuta en las primeras elecciones sindicales libres de 1978 con una representatividad del 53,3 por ciento de todos los delegados elegidos. Revalidará su condición de central mayoritaria en las elecciones sindicales de 1982, 1986 y 1990 con porcentajes que oscilan entre el 50 y el 60 por ciento de la representatividad. Desde la década de los 90 viene ostentando una importante representatividad que ha oscilado entre el 35 y el 40 por ciento del total de los delegados elegidos.
La UGT es una central sindical plenamente consolidada en Ceuta con importante presencia en la mayoría de los sectores laborales de la ciudad y con una fuerte representación institucional. Durante la mayor parte del período ha mantenido un acuerdo de unidad de acción con CC.OO., junto a la que ha protagonizado las más importantes movilizaciones sindicales ceutíes y la dinámica huelguística, así como la negociación colectiva.
Entre sus principales dirigentes han destacado los secretarios generales: Manuel Muro Arquero, José Masot Yborra, Francisco Roldán, Alejandro Bodas Clavijo, Soledad Ruiz Seguín, Alejandro Curiel y Antonio Gil Mellado. Desde abril de 2016 el secretario general es Juan Carlos Pérez Ortega.
La UGT ha jugado en Ceuta, desde finales de los años veinte hasta nuestros días, un importante papel en la defensa de los intereses laborales, sociales y políticos y en la mejora de las condiciones de los trabajadores y trabajadoras.